Ortodoncia invisible en Ronda

Muéstrale al mundo tu sonrisa perfecta

El tratamiento de ortodoncia invisible es tan satisfactorio para el paciente como para el profesional que lo realiza. No solo obtiene muy buenos resultados en poco tiempo sino que también es cómodo y discreto. Además, es removible, por lo que ofrece cierta libertad a la persona que lo lleva.

Los tratamientos de ortodoncia invisible se recomiendan a pacientes con problemas de malposición dentaria que afectan a la funcionalidad bucal y a quienes sufren apiñamiento dental. También sirve para hacer frente a casos de protrusión y a quienes presentan un excesivo espacio entre los dientes. Aunque el resultado es una sonrisa completamente alineada y bonita su labor también es evitar problemas de mordida, fonación y otras patologías más graves.

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Invisalign, alineadores transparentes y removibles

En nuestra clínica dental en Ronda utilizamos el sistema Invisalign. Se compone de alineadores transparentes que ejercen presión en las piezas dentales provocando su movimiento. Estas férulas se fabrican especialmente para cada persona, teniendo en cuenta las peculiaridades de su dentición. Así, se van renovando cada poco tiempo, acompañando a las variaciones y movimientos dentales.

No hay duda de que la transparencia de su material hace que sea una solución atractiva para cualquier paciente. No obstante, cuenta con una ventaja añadida que lo diferencia de otros sistemas: la posibilidad de quitarse los alineadores. Aunque es fundamental transmitirle al paciente la necesidad de llevar el aparato, al menos, 22 horas al día, este puede quitárselo para comer o cepillarse los dientes. Ofrece cierta flexibilidad a las personas con una ajetreada vida social o compromisos laborales en los que la imagen cuenta. Invisalign también puede ser utilizado por niños y adolescentes, con un diseño específico para edades más tempranas.

Por tanto, Invisalign presenta importantes ventajas con respecto a la ortodoncia convencional con brackets:

Es un sistema mucho más discreto y estético.
Es más cómodo al permitir la retirada de las férulas en momentos concretos.
No interfiere en las comidas ni en la higiene oral.
Se renueva a medida que avanza el tratamiento, es totalmente personalizado.
No causa molestias ni rozaduras.

La duración del tratamiento dependerá de las particularidades de cada caso pero, en general, se puede establecer una duración de entre 12 y 18 meses. En nuestra clínica dental hacemos un estudio previo de la boca del paciente para determinar las características del tratamiento.